La estampa japonesa (UKIYO-E)

La estampa japonesa, conocida también como Ukiyo-e o pinturas del mundo flotante. Es un tipo de arte que se desarrolló en la época Edo (antiguo nombre de la ciudad de Tokio, una ciudad llena de placeres, denominada por eso como el mundo flotante) entre los siglos XVII y XX. Estos grabados aparecen como consecuencia de la urbanización a finales del siglo XVI, donde surgió la demanda de nuevas clases sociales, apareciendo así la burguesía. 

Éste arte fue descubierto en Europa a finales del siglo XIX, donde los impresionistas de la época se sentían atraídos e influenciados por los paisajes y costumbres del antiguo Japón. Esta influencia se manifestó en distintos campos de índole variada, como la literatura, la vestimenta, los perfumes, los espectáculos y el arte en sí. 

Aunque no es muy conocida en occidente, éste género de grabados era de fácil acceso ya que podía ser reproducido de manera masiva. Era la composición de una obra con tres intervenciones, la del tallador, el grabador y el pintor. Como los dos primeros no figuraban como artistas serios, solo se ponía el nombre del pintor en la obra. La mayoría  de estos grabados eran comprados por habitantes del Japón que no podían pagar una pintura original. 

Las principales características de estos grabados son su semejanza con la realidad y la vida cotidiana, generalmente son grabados sobre madera, existe una coloración variada e intensa, el dibujo es nítido y seguro. 

Algunos de los pintores más famosos son: Hiroshige Ando, Hokusai Katsushika, Utamaro Kitagawa, Suzuki Harunobu y Sharaku. 

Hiroshige Ando: “Tokaido 53 Fujikawa” (1834) 

"Cortesana" Utagawa Toyokuni (Toyokuni ga) Grabado en madera a la fibra, nishiki-e, 390 x 265 mm (ôban) c. 1810 - 1820 Madrid, Museo Nacional del Prado.

Suzuki Harunobu. De la serie: “Palitos de tinta elegantes en cinco colores”(1767)

"Shiba Shinmei Keidai [Alrededores del templo de Shiba]". De la serie Tôto meisho [Vistas famosas de la Capital Oriental] Utagawa Hiroshige (Hiroshige ga) Grabado en madera a la fibra, nishiki-e, 250 x 375 mm c. 1832 - 1838 Madrid, Museo Nacional del Prado.

Francisco de Goya y Los Caprichos

Han pasado dos días desde que visité el Centro Cultural Clavijero (jueves catorce), en donde tuve la oportunidad de apreciar una magnífica exposición de grabados hechos por Francisco de Goya. 

Goya, pintor y grabador español, nació en una pequeña provincia de Zaragoza, España. Es considerado uno de los artistas más importantes de su tiempo, incluso visto desde diferentes facetas, desarrolló un estilo que pronto llegaría a inaugurar el Romanticismo. 

La serie de grabados titulada Los Caprichos, es conjunto de 80 placas trabajadas con la técnica buril. Esta serie fue hecha entre 1796 y 1798, y ya en 1799 fueron impresas por vez primera bajo el nombre de Colección de estampas de asuntos caprichosos, inventadas y grabadas al aguafuerte por Don Francisco de Goya". 

Esta serie de grabados se caracteriza por su alto grado polémico y retador. Atentando en contra de la burguesía, los prejuicios y las extrañas creencias de ámbito religioso con un toque sarcástico.  

Para mí, esta exposición me hizo querer exigirme aún más para poder lograr hacer grabados de calidad. Sé que esto es el inicio y quizá resulte ser que el grabado no es para mí, pero al saber de la vida de Goya y la carga social que representaban sus grabados, me metió esta idea de expresar todo lo que quiera, sin miedo a nada ni nadie. 

Capricho No. 6: Nadie se conoce 

Publicada en 1799

Aguafuerte, aguatinta, y retoques de punta seca sobre papel. 

El mundo es una máscara, el rostro, el traje y la voz todo es fingido. Todos quieren aparentar lo que no son, todos engañan y nadie se conoce. 

Capricho No. 9: Tántalo
Publicada en 1799
Aguafuerte, aguatinta y retoques de punta seca sobre papel.

Si él fuese más galán, y menos fastidioso ella reviviría. 

Capricho No. 72: No te escaparás
Publicada en 1799
Aguafuerte, aguatinta y retoques de punta seca sobre papel.

Nunca se escapa la que se quiere dejar coger. 

Capricho No. 40: ¿De qué mal morirá? 

Publicada en 1799
Aguafuerte, aguatinta y retoques de punta seca sobre papel.

El médico es excelente meditabundo reflexivo, pausado serio. ¿Qué más hay que pedir?

De mí

Me llamo Mariana Martínez, soy de Morelia, Michoacán y tengo dieciocho años. 
La vida es tan corta e impredecible que resulta tonto no buscar lo que te apasione, porque a fin de cuentas uno hace de su vida un arte, y si no es así, ¿por qué esperar hasta la siguiente vida para comenzar a disfrutar de aquello que te llena? ¿por qué no ahora? 

Jaguar.
Froylán Ruiz, pintor y grabador mexicano.